Mohammad Khosraviragh, el copiloto-instructor iraní del avión venezolano que vino a nuestro país, salió al paso ante las declaraciones del presi Marito Abdo, quien afirmó que Khosraviragh fue a Cuba para cambiarse el rosto.
“Nunca en toda mi vida estuve en Cuba. Ni siquiera había estado en Latinoamérica antes de este viaje”, aseguró el iraní a Página/12, un medio argentino.
“Nunca fui operado de nada. Ni de la cara, ni siquiera de apendicitis. No tengo una sola cicatriz y cualquiera puede ver que no tengo tampoco ninguna marca”, siguió explicando.
La aeronave y sus 19 tripulantes siguen retenidos en un hotel en Argentina, con la prohibición de salir del país, ya que afirman que tiene nexos con el terrorismo internacional.
Fuentes de inteligencia consideran que lo del cambio de cara es descabellado, no hay antecedentes de que se haya hecho en ningún lado. Sí, en cambio, hay antecedentes de operaciones de cambio de huellas digitales, según Página/12.