Una mujer se quedó con la boca abierta tras realizarse un examen de ADN y darse cuenta de que al menos tiene más de media docena de hermanos en su propia ciudad. De inmediato reclamó a su mamá, quien le dijo que ella fue concebida por inseminación artificial, realizada por un ginecólogo de la zona.
Decidida, Hellquist, la denunciante, acompañada de sus hermanos para reclamarle al médico Morris Wortman por el hecho. El hombre había dicho que el esperma que aplicaba a las mujeres fue de un estudiante universitario, pero tras ser apretado, confesó que él mismo se masturbaba y usaba con sus pacientes interesadas en tener un bebé. Es decir, se cree que tendrá más de cien hijos. El llamativo hecho ocurrió en Estados Unidos.
La mujer finalmente resultó ser de ascendencia judía, ya que su papá biológico lo es. Tras la prueba de ADN de la mujer y los otros demandantes, se reveló que Wortman es en el 99,99% el padre de todos. Ahora deberá hacerse cargo por las denuncias legales y eventualmente de la herencia.
La noticia causó revuelo en el país norteamericano y, al parecer, hay más hijos okára que denunciarían al médico para que se haga cargo de ellos.