Ya no será necesario ocultar pistolas y revólveres en el estado norteamericano: pueden llevarse a la cintura sin inconvenientes. Una ley firmada por el gobernador texano Greg Abbott, pone fin a la prohibición de portar armas a la vista que existía desde hace 125 años.
A la vista
Las armas podrán portarse abiertamente en fundas fijadas al cinto o al hombro, si el dueño tiene una licencia emitida luego de una verificación de antecedentes. Las armas no podrán llevarse a bares, escuelas o empresas privadas que decidan prohibir su exposición; también se prohíben en las cortes y eventos deportivos.
Iglesias divididas
Algunas iglesias, como la católica, prohibieron el acceso a quienes exhiban sus armas, pero otras lo han aceptado. Según el Departamento de Seguridad Pública, en octubre unas 922 mil personas estaban autorizadas en Texas a portar armas ocultas. Ahora todas ellas están autorizadas a portarlas abiertamente, sin ningún otro trámite.