
Irlanda se convirtió ayer en el primer país en aprobar por voto popular las bodas homosexuales en Dublín.
“Irlanda ha hecho historia”, dijo el primer ministro Enda Kenny, del Partido Conservador Fine Gael. “Hemos demostrado lo que somos, un pueblo generoso, compasivo, valiente y alegre”, agregó. La Iglesia había llamado a votar por el “no” en un país donde el 84,2% de la población se dice católica, pero los irlandeses dieron la espalda a este llamado. Con la totalidad de los votos del referéndum del viernes escrutados, el “sí" ganó con 62,1% de los votos, por 37,9% para el “no”.
Revolución cultural
De este modo Irlanda se une a los 18 países del mundo, entre ellos España, Uruguay, Argentina y Brasil, donde el matrimonio homosexual ya es legal. En el Reino Unido lo es desde 2014, salvo en Irlanda del Norte.
Además, es el primer país del mundo en aprobar en referéndum el matrimonio homosexual, algo que antes probaron Croacia y Eslovenia, sin éxito. Los partidarios de la reforma constitucional recibieron además el apoyo de grandes celebridades como el cantante Bono, del grupo U2, o el actor Colin Farrell.