El papa Francisco instó ayer a los curas a hacer homilías cortas que “no superen los ocho minutos” para que los fieles no se “duerman”.
La homilía o el sermón es el discurso con el que sacerdote comenta una lectura del evangelio. “La homilía debe ser corta. Una imagen, un pensamiento, un sentimiento”, declaró Jorge Bergoglio durante su audiencia general semanal.
“La homilía no debe superar los ocho minutos porque tras ese lapso de tiempo, se pierde la atención [de los fieles], la gente se duerme, y tienen razón. Así es como debe ser una homilía y eso es lo que quiero decirle a los curas que hablan tanto, tan a menudo, y no se entiende de lo que hablan”, agregó el papa argentino.
No es la primera vez que el papa se pronuncia en este sentido. En 2023 afirmó que las homilías demasiado largas son un “desastre”.
Al respecto, el padre Reinaldo Roa, párroco de la parroquia Señora del Carmen, dijo a EXTRA, que generalmente las homilías duran entre 15 a 20 minutos, principalmente en las parroquias de Asunción, que también es un tiempo prudencial para nuestra gente, que “espera con ansias” la homilía, he’i.
Pero aclaró que hay que reconocer que tiene colegas que a veces también se van por las ramas y se extienden hasta media hora o más.
“Esta recomendación es más que nada para que los sacerdotes se centren en la homilía y no haya mucho divague. Señaló que hay zonas donde sí se necesita alargar la prédica, porque son lugares donde la gente necesita mucho de Dios.