El expresidente y actual senador Fernando Lugo está mostrando “signos de mejoría significativa”, informó hoy su colega en el Parlamento y médico de cabecera, Jorge Querey.
El también exobispo de San Pedro, internado en el sanatorio Migone de Asunción, se viene recuperando tras el accidente cerebrovascular (ACV), que había sufrido el pasado miércoles 10 de agosto, en su oficina del Congreso.
“Desde hace 72 horas, hemos tenido progresos sucesivos, metas que hemos ido alcanzando, con respecto a retirar los soportes, los medicamentos, etcétera”, comenzó diciendo el legislador.
Explicó los avances que se lograron, “hasta tal punto que esta tarde ha estado muy reactivo; él ha respondido a los estímulos que se han planteado; ha abierto los ojos”.
“Hay signos muy esperanzadores de que él pueda recuperarse significativamente, usando la terminología de los últimos tiempos”, apuntó.
Sostuvo que “hoy ha sido un gran día para nosotros”, en referencia a “todo el equipo médico que estuvimos acompañando”.
“Esa apertura ocular es un signo y esa respuesta ocular a estímulos es una respuesta muy positiva”, remarcó Querey, ante periodistas.
Mencionó que “hoy le hemos hecho los controles tomográficos y el cerebro está en proceso de cicatrización de la lesión que él ha tenido”.
“Mi idea es retirarle los sedantes y el respirador, en lo posible, el día de mañana”, sostuvo.
Lugo se había desvanecido en despacho, de donde fue sacado en silla de ruedas y luego llevado en a
mbulancia hasta el sanatorio San Roque, para después derivarlo al Migone.
Aquella madrugada del jueves, fue sometido a una neurocirugía, que duró unas 4 horas, a causa de una hemorragia en el cerebro. Desde entonces, quedó en terapia intensiva.
La semana pasada, se hizo un primer intento de retirar los soportes, pero un problema de sangrado en la laringe, debido a la intubación, retrasó el procedimiento y le hicieron una traqueotomía.
A partir de ahí, comenzó de nuevo el proceso de retirarle todos los soportes de máquinas, sedantes y otros, según se informó.