Los gym ya volvieron a abrir. Las chicas y los muchachos no quieren desperdiciar ni un momento para perder el peso que adquirieron en la cuarentena. Pero atentis, no hay que abusar, aconsejan los profesionales.
“Nos deja más vulnerables”, dijo el profesional
Someter al cuerpo a ejercicios de alta intensidad por un tiempo mayor al recomendado, por la ansiedad de estar a punto a corto plazo, no es lo más conveniente, asegura el Lic. Eduardo Enciso, titular del Departamento de Prevención y Control de Factores de Riesgo del Ministerio de Salud.
Consecuencias
“Cuando hacemos ejercicios o entrenamientos de alta intensidad o muy prolongados en el tiempo (más de 1 hora), las células del sistema inmune no pueden volver rápidamente a sus funciones normales, de proteger nuestro organismo, porque se liberan al torrente sanguíneo moléculas que tienen efectos inflamatorios que se producen durante un determinado tiempo en que estamos vulnerables”, explicó Enciso.
La práctica excesiva de ejercicio físico puede ocasionar lesiones, si no parás de entrenar tu cuerpo, las articulaciones y los ligamentos no pueden descansar, están siempre sobreexigidos, por lo cual aumentás el riesgo de padecer fracturas y fisuras. Además, puede producir problemas cardiacos.
Recomendaciones
- No realizar de golpe ejercicios o entrenamientos de alta intensidad
- La práctica de ejercicios o entrenamientos no debe superar la 1 hora, ya que esto pondría al organismo en estado vulnerable para adquirir cualquier virus circulante.
- En esta pandemia, según Enciso, lo aconsejable es realizar los ejercicios de forma progresiva, de leve a moderada intensidad, con especial énfasis en priorizar la calidad del movimiento y adaptar el volumen e intensidad conforme a la condición física inicial de cada persona. De acuerdo a la evidencia actual, esta forma de ejercitarse es la que aporta grandes beneficios al sistema inmunológico.
- El profesional también recomendó que durante los ejercicios físicos, la persona que entrena debe estar guiada por un profesional. Se recuerda que la actividad física debe producir bienestar y no sufrimiento, cuando sentís que tu cuerpo ya no puede, lo mejor es parar con los ejercicios.