Seini Kim acaparó la atención de la muchachada al contar que su casero la echó de su departamento por tener COVID–19.
Esta situación la dejó muy bajoneada, pero la cuerona indicó que todo el apoyo que recibió la llenó de fortaleza.
“Estoy sensible, pero ya amanecí mejor. En un momento me arrepentí de contarlo, pero también me dije que alguien tiene que hablar. Ahora ya traté de cambiar, de estar más fuerte, porque hay momentos en los que tengo miedo, te da miedo estar sola con una enfermedad que no sabés cómo va a ser. A algunos no les pasa nada, otros empiezan con una gripe y terminan en terapia, también dicen que sin una enfermedad de base no pasa nada. Pero es como tener un invitado extraño, no sabés qué te puede hacer”, expresó.
Tras el sarambi el propietario del edificio dejó en paz a la radialista. “Pensé que me iba a molestar por todo lo que salió en los medios, pero por el momento nada. Yo le dije que conozco mis derechos”, destacó.
Está mejor
La locutora indicó que está con un poco de fiebre y algunas molestias, pero cree que va mejorando de a poco. Le agradeció a la gente que le ofreció sus viviendas para que pueda mudarse tras completar la cuarentena.
“Una señora de Ñemby me ofreció su alquiler, pero me queda lejos, mucha gente me ofreció sus viviendas. Sigo buscando uno que no sea muy caro y que ofrezca la posibilidad de pagar fraccionada la garantía, de otra manera será difícil. Ya quería mudarme por el trato del señor, pero por el tema económico no podía. Es mucho: pagar alquiler, mudanza, más la garantía y el alquiler del nuevo lugar. Estoy pensando si tal vez voy a lo de mi mamá”, explicó.
Por último, Seini lamentó que algunos de sus vecinos se queden mirándola desde lejos.
“Tengo una ventana que da al balcón, donde veo que mis vecinos me están mirando y es muy incómodo. Pero voy a abrir ya la ventana para que me vean si tanto quieren mirar. No sé qué piensan, que estoy echa un zombi o algo así”, añadió.