Tremendo lío familiar se dice que hay en el entorno de Fátima Román porque según denunció a los medios de espectáculos su propio primo, Diego Rivarola, el bochornoso hecho supuestamente había ocurrido en el año 2016 cuando la cumbiera aún no tenía mucha notoriedad en los medios de espectáculos.
Según relató, Fulgencia Jara Román, la mamá de Rivarola, se había ido hasta la casa de Fátima a reclamarle a la mamá de esta un problemita que tenían respecto a un puesto de comida rápida que provocó una guerra de nervios en la familia. Esto enojó a la cantante quien no dudó en ir hasta la casa de su tía a decirle que atropelló su vivienda y entre dimes y diretes había proporcionado unos golpes de puños a la doña.
Román tenía que presentarse ayer a declarar sobre este drama familiar, pero según la parte querellante decidió no asistir. El abogado de la supuesta agredida, Alfredo Sanabria, habló con Epa! explicando lo acontecido: “Esta es la tercera vez que suspenden el juicio oral debido a una recusación en contra del juez Rodríguez Masi, argumentando los mismos puntos que en la Cámara de Apelación ya fueron rechazados y confirmado la competencia del mismo juez, y con ello lo único que están haciendo es dilatar el proceso y lograr la extinción de la causa de la presente querella de tal modo que puedan salir del problema sin llegar a juicio oral”.
¿Malos parientes?
En su momento la cumbiera había manifestado que están buscando de manera inútil dejarla mal parada ante la opinión pública haciendo un circo con algo que ya ocurrió hace unos años atrás y alegando que se aprovechan de la situación justo en el momento que comienza a tener éxito en su carrera musical.