Hortensia Morán, una de las mujeres que demandó a Fernando Lugo por reconocimiento de filiación, cambió radicalmente su vida tras los escándalos que vivió reclamando que el expresidente reconozca a su hijo. La docente reveló en entrevista con EXTRA que sostener su postura ante el exobispo no fue fácil y por ese motivo se escapó de las polémicas viajando a Ciudad del Este, para refugiarse en la iglesia evangélica “La Casa de la Restauración”.
“Yo lo perdí todo y necesitaba de la comunidad cristiana. Encontré un camino y una familia maravillosa acá. Estaba quebrada en todos los sentidos, viví una persecución mediática y sistemática. Tuve que buscar la forma de salir adelante, sin renunciar a mis principios. Me enfrenté al presidente de la República y no me entregué, tampoco acepté sus propuestas indecentes”, comentó.
La exparticipante del “Baila Conmigo Paraguay” destacó que chocar contra el primer mandatario de aquel entonces fue muy complicado. Aseguró que la forzaron a renunciar a su vida.
“No busqué ser famosa. Me perjudicó mucho en mi profesión. Tenía un hogar de niños, mi trabajo, mi casa y tuve que renunciar a todo. Sufrí persecución, hicieron manifestación en mi trabajo, me cortaron la luz, una vez chocaron contra mi institución, una serie de cosas que ya no aguanté”, detalló.
Quiere vivir con dignidad
Encontrar trabajo como docente luego de ser famosa es muy difícil, asegura Morán, quien actualmente hace de todo para llevar el pan de cada día a su casa. “No tengo trabajo, me mantengo haciendo reemplazos a las compañeras docentes, vendiendo ropa y ensalada de frutas. Dignamente nos estamos manteniendo con mi hijo”, destacó.
A pesar de que en su momento se lanzó como candidata a concejal, por el movimiento de Horacio Cartes, ahora ya no quiere saber nada de la política. Sueña con volver a su vida tranquila como profesora.
“Mi vida está transformada en Cristo y buscaré trabajo por las vías legales y naturales”, agregó.
