La periodista Patricia Vargas escribió en sus redes sociales que ayer por la noche tenía que estar vestida de blanco, con su ramo de novia, caminando al altar para decirle a Toto Ramírez “Sí, acepto” y jurarse amor para toda la vida. Pero lastimosamente no pudo ser porque la pandemia frustró el romántico plan de la pareja que tuvo que suspender el casorio y ver otra fecha.
“Hoy, 18 de abril, lo más importante para mí iba a ser llegar a tiempo a la iglesia, luego al Civil y que todos estén alegres conmigo y Héctor. Nos quedamos con las tarjetas en mano, un smoking y vestido de novia colgando. Hoy, lo más importante es que todos estemos sanos y salvos”, fue su posteo en Twitter.
COMPLICADA DECISIÓN
En comunicación con EXTRA la comunicadora explicó que fue muy difícil tomar esta postura, pero entiende que fue lo mejor por la seguridad sanitaria de todos.
“Nosotros suspendimos la boda el día que íbamos a empezar a repartir las tarjetas. Con el primer decreto ya levantamos la oreja y en cinco días tomamos la decisión. Nos dolió un poco, pero sabíamos que era la mejor decisión. Yo averigüé con varios funcionarios de blanco de Salud para que me guiaran para ver qué hacíamos. Ellos me recomendaron suspender y para mí los médicos hoy son palabra santa respecto a esta pandemia”, explicó Vargas.
Agregó que se quedaron con algunos gastos, pero no son demasiados, las empresas entendieron la situación que se vive en el país.