El motel Sander II, de Ñemby, albergó a dos pacientes con sospecha de coronavirus y los vecinos quemaron llantas en protesta.
Caía la noche del lunes, en el barrio Caaguazú, cuando los pobladores observaron que una ambulancia ingresó al motel. Días atrás ya corría el rumor de que el dueño del “nidito de amor” ofreció sus instalaciones para los afectados con el virus, ya que no hay clientes.
“Nos están mintiendo y eso es lo que molesta. El motel tiene resguardo policial hace varios días ya. Sabemos que serían 10 paraguayos que llegaron de Italia los que están ahí. No les queremos en nuestro barrio”, indicó H.M, vecino.
Salió de control
Los pobladores se aglomeraron al costado del motel, gritaron y tiraron cosas dentro del predio.
La policía solicitó refuerzo de antimotines, también llegaron militares. Los vecinos se negaban a ir a sus casas, hasta que alguna autoridad se presente.
El doctor Víctor Meza, director del Hospital de Ñemby, llegó al sitio para calmar las aguas.
“Se trata de dos pacientes que llegaron del exterior y tienen que cumplir cuarentena. No es cierto que dieron positivo”, manifestó el médico. El director explicó a los vecinos que la enfermedad no se transmite por el aire, por lo que, si no entran en contacto con un enfermo, no van a terminar infectados por el virus.
El embajador Federico González pidió colaboración mediante la “responsabilidad ciudadana” y más empatía con los afectados por la enfermedad.
En Ciudad del Este, el motel de Cucho Cabañas y el Hotel del Lago, es usado para la cuarentena de compatriotas llegados de Brasil. Los vecinos también se oponen.
El miedo y el odio crecen
La quinta víctima por coronavirus fue un señor de 65 años, de Pedro Juan Caballero.
Su hijastro compartió un video, en Facebook, donde cuenta que los vecinos les responsabilizan de llevar el virus a la ciudad.
“Doloroso es la incomprensión de la sociedad ante esta situación. Mi padrastro falleció y se le está culpando a mi hermana, que llegó de España hace un mes, de traer el virus. Me parece doloroso que las personas señalen sin saber el problema de los demás. Mi padrastro sufrió mucho por la falta de atención acá en Pedro Juan y la gente en vez de ayudar, de rezar, tira odio”, señaló.
El propio intendente, José Acevedo, dijo que sospechan que la hija trajo el virus de Europa.