Los peluqueros tienen el “ok” de Euclides Acevedo, ministro del Interior, para abrir sus locales. Sin embargo, la realidad es que la cuarentena tiene a los clientes ahorrando hasta el último guaraní.
Roberto González, presidente de la Unión de Peinadores del Paraguay (UPP), señaló que hacen de todo para meter un poco de platita durante la pandemia del coronavirus.
“Estamos llamando a nuestros clientes fieles, para avisarles que estamos trabajando, para agendar algo. La verdad es que la restricción de circulación nos sigue afectando”, expresó.
Algunos locales están abiertos, pero trabajan con el personal mínimo porque la gente solo acude para lo indispensable. “No se sabe hasta cuándo va durar la cuarentena y los clientes no gastan su plata. Se limitan a hacerse cortes y teñido de cabello”, reveló González.
Los trabajadores que hacían manicura y pedicura, tratamientos de cabello, limpieza de cutis, masajes y otras chucherías, están en sus casas sin recibir ningún ingreso. La mayoría ganaba por día o comisión.
Pidieron ayuda
El gremio de peluqueros, como miembros de la Unión Industrial Paraguaya, solicitó ayuda.
“Pedimos acceder a alguna ayuda del Gobierno, pero como la mayoría tributamos o tenemos una pequeña sociedad, no calificamos ni para acceder a los préstamos con intereses bajos”, lamentó González. La situación para los estilistas no es sencilla, pero están batallando, ofreciendo atención, respetando todas las medidas sanitarias. Usan tapabocas, guantes, incluso protectores faciales de plástico.
Son muchísimos
Enrique López Arce, especialista en empleo, indicó que existen 5.500 peluquerías registradas a nivel país.
Unas 100.000 personas dependen de ese rubro.
Arce recomendó al sector agendar las atenciones de manera a evitar la aglomeración de gente.
En las redes sociales hubo enfrentamiento de opiniones: algunos apoyan que los negocios vayan abriendo de a poco. Otros están en contra. Recordaron a la compatriota que es peluquera y se infectó en España, atendiendo a una clienta que no tenía síntomas.