Una ola de calor está castigando a países de Europa, donde la gente busca la manera de refrescarse, ya sea en playas y en fuentes instaladas en plazas públicas, donde se ve a las personas refugiarse en las sombras de los árboles y edificios, además del uso masivo de sombrillas.
El miércoles se registraron temperaturas extremas de hasta 47 °C en algunas ciudades de España, cuando faltaba una semana para el inicio del verano, que será este 21 de junio.
En el país ibérico se están produciendo alarmantes incendios forestales como en Baldomar, provincia de Mérida, en Cataluña, donde el fuego ya destruyó unas 500 hectáreas de bosque, además de otros siniestros en otros puntos, según datos de ayer.
Francia también vivió una semana de altas temperaturas de hasta 40 °C. Las temperaturas superan en más de 10°C la media de esta época del año. Esto se combina con la sequía en muchas partes de Europa.
Otro punto del mundo donde se registran altas temperaturas es en los Estados Unidos, al otro lado del Atlántico, donde se enfrenta al segundo o tercer año consecutivo de sequía, dependiendo de la región. Partes del centro de Nevada hasta el noroeste de Arizona enfrentan un riesgo crítico de incendio, según el Servicio Meteorológico Nacional de EE. UU.
