Las dos hijas de M.R. (27) y S.S. (30) eran muy pequeñas cuando en 2011 sufrieron la separación de ambos.
En idas y vueltas que duraron varios años, ellas vieron a sus progenitores pelear por sus custodias, pero las niñas no lograban identificar el verdadero problema que se avecinaba: vivir con dos padrastros desconocidos en una pequeña pieza, ubicada en una lejana compañía de Yaguarón.
Cambio radical
Pocos meses después de la separación, la mujer se mudó junto a su nuevo novio, R.C., llevándose a sus hijas.
Un año después nació el primer fruto de la relación, que hoy tiene seis años de edad y sin mucho que esperar llegó el segundo hijo, con tres años actualmente.
El papá de las niñas pegó el grito al cielo cuando se enteró de que un tercer hombre, H.G., vivía con ellos. Hace casi un año que todo el vecindario sabe que en esa pequeña pieza hay “amor de tres”.
El papá biológico de las nenas denunció en la Codeni la situación en que se encontraban ellas y nuevamente pidió ayuda para tener la custodia legal. El documento tiene el sello de la Municipalidad de Yaguarón y la firma de la Abogada Cecilia Díaz, actual directora de la dependencia.
Se escapó
La hija de 11 años no quiso esperar más: se escapó y fue a la casa de sus abuelos paternos. La familia nuevamente acudió a la Codeni y, con ayuda de una defensora pública, la abogada Gladys Páez de Capurro, tramitaron el pedido de convivencia.
La menor manifestó que no quiere volver a vivir con su madre porque ha sufrido maltratos físicos y psicológicos. Expresó además que su madre tiene problemas de alcoholismo, lo que le hace perder la razón. Actualmente vive con su familia paterna, pero nada saben de la niña menor.
Otro caso
En la compañía Ñandu’a de Yaguarón los vecinos expresaron su preocupación por los cinco niños que viven con un hombre y sus dos concubinas. Patricio F., hermano del hombre, aseguró que la concubina más joven es sobrina de ambos. “Ella es la hija de nuestro hermano que ya falleció", dijo Patricio a EXTRA. La Codeni prometió intervenir para constatar el estado de las criaturas.