La cosa se ve un poco difícil, pero las trabajadoras domésticas no pierden la esperanza de alcanzar la igualdad legal, asegura Librada Maciel, del Sindicato de Trabajadoras Domésticas de Itapúa (Sintradi).
Hoy la Cámara de Diputados define cuál deberá ser el salario piso del trabajo doméstico, luego de tres años de lucha de las empleadas por modificar el artículo 10 de la ley 5407/15, que establecía solo el 60% del sueldo mínimo para ellas.
El pasado 14 de marzo, el Senado se ratificó en otorgarles el 100% del sueldo mínimo, luego de que Diputados haya modificado el proyecto original, dejándolo en el 70% del mínimo.
La Comisión de Legislación de Diputados dictaminó a favor del 70%, pero si no alcanzan los 53 votos necesarios para la sanción inicial, quedará la versión de los senadores. Miembros de los sindicatos de domésticas se movilizarán hoy frente al Congreso Nacional.
Según la Dirección General de Estadística, Encuestas y Censos un 16% de las mujeres con empleo son domésticas. En total 231.000 están en este rubro.
A pesar de que trabajan toda la semana y con suerte tienen un día completo para descansar, las domésticas de Asunción y Encarnación se aventuraron en el mundo de la radio, para hacer conocer a otras colegas cuáles son sus derechos.
En la radio comunitaria Costa de la Chacarita, todos los domingos de 15:00 a 17:00 pasa el programa Doméstica Ñe’ê, conducido por las mujeres del Sindicato de Trabajadoras del Servicio Doméstico del Paraguay (Sintradespy).
Orgullo
La producción está a cargo de Monserrat Martínez, una de las más jóvenes, que además está por recibirse de periodista. Pudo cursar la carrera gracias a su trabajo limpiando casas y está orgullosa de sus logros.
“Gracias al programa muchas trabajadoras más se sumaron al sindicato, desde que supieron cuáles eran sus derechos”, afirma.
En el sur del país, las asociadas del Sindicato de Trabajadoras Domésticas de Itapúa (Sintradi) también tienen un programa dominical llamado La Hormiguera en la 101.5 FM Radio Itapúa, donde se dirigen a sus colegas y tienen bloques especiales de salud, con invitados especiales.
“Es un sueño hecho realidad”, cuenta Librada Maciel, que nunca se imaginó que tendrían juntas un programa para promover sus derechos.
Abarca a muchos oficios familiares
Esta ley incluye, además de las trabajadoras domésticas, a los choferes de familia, amas de llave, mucamas, lavanderas y planchadoras en domicilios, niñeras y cuidadores de adultos, cocineras de familia y sus ayudantes, jardineros dependientes y ayudantes y mandaderos.
Se calcula que en todo el país hay unas 220.000 personas haciendo estos trabajos. Una opción que plantean los sindicatos es pagar por horas, para los que no tengan posibilidades para más.