El 5 de enero y con presencia del presi Santiago Peña fue inaugurada la playa Municipal de Pilar, como una alternativa de recreación, pero la alegría pilarense terminó muy temprano, al menos, por el momento.
El ingreso a las aguas de la playa fue suspendido, en coincidencia con recientes ataques de pirañas. Sin embargo, el motivo de la clausura no se debe a las mordidas de estos peces.
El inspector general de la comuna, David Ojeda, explicó a EXTRA que la suspensión se debe a la bajante del río Paraguay, algo atípico para la época.
“En la parte que queda, el agua ya es muy profunda, ya no podemos dejar que ingresar a las personas, por cuestión de seguridad”, indicó.
Agregó que por precaución también seguirán los controles en la zona y evitar que intrépidos bañistas quieran ingresar al agua.
Ojeda detalló que el lugar estaba habilitado por el MADES y contaban con baños sexados, socorristas, personal de la Naval y la Policía Nacional cuidando a los asistentes.
“Estas dos semanas, yo fui testigo de que las personas ingresaban con comidas al agua. Pizza, por ejemplo. Ponían su cartón y flotaba. Les pedía encarecidamente que salgan a consumir afuera y no hacían caso, entonces ahí entraba la policía a ayudarnos”, comentó.
“Inusual”
Adam Leguizamón, director de pesca del MADES, indicó que este ataque es atípico en la zona y que se debe a varios factores.
“La bajante del río, la alta temperatura, la comida de las personas en el agua y la pesca. Allí los pescadores lavan a los pescados y tiran los restos. Además, las pirañas tienen un tiempo de desove más largo que los otros peces”, explicó.
Estos pira dientudos tienen diferentes especies y se encuentran en todas las aguas del territorio nacional, pero no siempre atacan a los bañistas, aseguró.