La contundente goleada de Cerro Porteño en la Nueva Olla casi pasó a segundo plano por el show que armó el entrenador de Tacuary, Iván Almeida.
En un momento del encuentro, el DT colocó tres botellitas de agua en el área técnica, lo que la hinchada azulgrana interpretó como una abierta provocación porque creen que hizo alusión a las tres Libertadores que tiene Olimpia. Esto, teniendo en cuenta el fanatismo de Iván y la historia que tiene su familia con el Decano.
El presi azulgrana, Juan José Zapag, fue consultado sobre lo ocurrido y minimizó los gestos del también exarquero franjeado.
“De poca importancia, victoria y los tres puntos en casa. Está haciendo una gran campaña, con chicos jóvenes, así que jamás desmeritaré su trabajo, pero a veces su corazoncito le traiciona”, declaró el mandamás.
Pero eso no es todo, Iván también mostró los tres dedos enardeciendo a los fanáticos que se encontraban dedicándole cánticos desde las gradas. A JJZ también le preguntaron sobre esa actitud, a lo que el dirigente insistió en que no le molestaba para nada.
“Nooo, con 5 a 0 pues nada te puede molestar. Capaz mostró los goles 5 adentro”, bromeó.
Zapag salió conforme con lo que demostró el Ciclón en el barrio y aseguró que hay con qué llegar al final del Clausura.
“Vamos por el campeonato, vamos adelante y vamos a seguir creciendo, veníamos con problemas de confianza, hoy Cerro Porteño mostró un gran nivel y eso nos llena de esperanza para lo que viene. Se mereció el resultado, Cerro Porteño ganó con autoridad”, manifestó.