Rebeca hace entrega de la camiseta firmada por los jugadores de Cerro Porteño a su abuelo, en presencia de otros familiares. La muerte es una etapa inevitable por la que atraviesa todo ser vivo. A sus 71 años, don Ramón Mendoza emprendió el viaje al más allá el jueves pasado, justo el día que su Ciclón querido redondeó una de las remontadas más épicas de la Copa Sudamericana.
Rebeca Lugo, nieta de don Ramón, publicó en su cuenta de Facebook un emotivo mensaje de despedida, en donde relató lo especial que fue la relación con su abuelo, fanático cerrista, y a quien le obsequió un preciado regalo con el que pudo partir en paz al otro mundo, pese a que ella simpatiza por el Franjeado.
“Era muy fanático de Cerro Porteño, siempre fuimos muy unidos. Tiene a un solo hijo cerrista y entonces él siempre quiso a una nieta que también lo sea. Así que cuando era niña veíamos juntos los partidos, tenía hasta mi camiseta de Cerro; pero también veía los partidos de Olimpia, hasta que un día me di cuenta de que me gustaba más Olimpia y comencé a ver jugar a los dos equipos. Un día me animé a decirle que ya no quería ver los partidos de Cerro porque era olimpista”, recordó.
A principios del mes de septiembre, don Ramón fue diagnosticado con cáncer en fase terminal, por lo que fue enviado de regreso a casa y pasó sus últimos días rodeado de sus seres queridos.
Regalo especial
Rebeca tuvo la brillante idea de dar un último y muy especial regalo. “Con ayuda de una amiga conseguimos que los jugadores firmen su camiseta de Cerro el jueves. Fui corriendo a entregarle, agarró y dijo que Cerro pasaba a cuartos y todos aplaudimos emocionados. Media hora después tuvo una crisis y falleció", recordó la nieta.