Antes de fin de año, los azulgranas se limitaron a observar cómo se reforzaba el acérrimo rival y las críticas hacia Juan José Zapag, presidente del Ciclón, estuvieron a la orden del día. Sin embargo, ni bien terminaron sus vacaciones, J.J. se sacudió y comenzó a revolucionar el mercado de pases, pero con la enorme ayuda del manager Pedro Aldave.
Ayer, Cerro Porteño oficializó a dos nuevos refuerzos: Jorge González y Raúl Cáceres. El primero fue una grata sorpresa para los azulgranas, el segundo ya estaba casi cerrado desde hace un buen tiempo. Con la llegada de “Torito” y Raúl, el Ciclón sumó su octavo refuerzo para la temporada 2016, pero todavía tiene a algunos pesos pesados en carpeta. Cerro compró el 100% del pase del exgumarelo y facilitó un contrato de 3 años.
La copa, en la mira
“Mi mamá, mi abuela y mi hermana son cerristas y están muy felices por este paso. Prometo al pueblo azulgrana mucho trabajo y dedicación. Ganar una Copa internacional también es un desafío para mí, nunca tuve esa oportunidad y ojalá que este grupo que se está formando como una gran familia termine regalando una gran alegría”, expresó González.
Además, el futbolista agradeció a toda la gente de Libertad y admitió que no pasó un mal trago en el club, pese a que fue separado del plantel para esta temporada. “Libertad ya es un punto aparte en mi carrera, hoy (por ayer) empiezo en Cerro Porteño y espero ser muy feliz acá”, disparó el “Torito”.
Otro que está bailando en una pata es Raúl Cáceres. El lateral por fin se puso la camiseta azulgrana. “Es un paso importante, porque es un club que aspira a ganar cosas internacionales y estamos todos ilusionados de poder hacer bien las cosas en el plano internacional. Mucha gente se acordó de mi pasado olimpista, pero yo hablaré en la cancha y no en las redes sociales”, apuntó el exsolense durante su presentación oficial.