
En la jornada 15 del Apertura, Rubio Ñu y Santaní hicieron muy poco para conseguir un triunfo en la Arboleda. En el primer tiempo no pasó casi nada frente a los arcos. La ausencia de los goleadores del torneo pudo haber sido uno de los factores: Cardozo en el dueño de casa y Leiva en la visita.
Sin la máxima emoción
No obstante, la segunda parte fue mucho más emotiva y las apuestas de los entrenadores fueron elevando las emociones en Santísima Trinidad. El arquero albinegro Gustavo Arévalos se vistió de héroe para llavear su portería y desactivar los peligros que generó el Albiverde en una ráfaga de buen fútbol. Los últimos minutos del juego fueron vibrantes. Marcos Acosta estuvo a centímetros de dar una agónica victoria a los santanianos. El empate no sirve de mucho a ninguno de los dos.
Por Carlos Martínez