Sportivo Trinidense fue el primero en anotar su nombre en la final de la Copa Paraguay 2023 y, aunque no necesitó recurrir a la tanda de penales para firmar la clasificación, su arquero fue clave en ese sentido dentro del tiempo normal.
Víctor Samudio le tapó un tiro penal a Néstor Camacho en el inicio y otro a Facundo Barceló sobre el final para que el Triki le termine ganando 2-0 a Guaraní. “Contento por la victoria porque estamos a un paso de hacer historia y también entrar en una copa internacional. Estuve atento en cada jugada, en cada pelota y lo más importante es que ayudé al equipo. Hicimos un buen partido y merecimos la victoria”, dijo en charla con Fútbol a lo Grande (1080 AM).
Sus atajadas fueron producto de un estudio previo que lo rindió a la perfección. “Hablamos con el preparador de arqueros, él tenía todos los videos de los que pateaban los penales y eso nos ayudó muchísimo”, contó.
Los caminos de la vida
El guardameta esteño de 36 años había debutado en primera división allá por el 2013 con Capiatá, luego reapareció en la máxima categoría en el 2018 ya defendiendo el arco de 3 de Febrero. En la siguiente temporada tuvo su segundo ciclo con el Escobero y en el 2020, cuando retornó al Rojo en la Intermedia, la pandemia le hizo tomar otro camino para poder subsistir. “Pasé muchas cosas malas, uno tiene que saber sobrellevar y aprender lecciones. Trabajaba de camionero, siempre trato de hacer cualquier cosa para ayudar a mi familia”, recordó.
Una vez superada esa etapa hendy, logró dos ascensos seguidos con Resistencia y Trinidense, donde se estabilizó y hoy disfruta de un gran presente a nivel grupal y personal.