En Olimpia la derrota de 4-2 ante Guaraní cayó más pesado que chocolate con banana. El equipo mostró una imagen para el olvido. Sin chances de campeonar, sin chances de ir a la Libertadores. El premio consuelo: la Sudamericana. Lo que los hinchas del Franjeado quieren es que termine cuanto antes el amargo Clausura.
El DT olimpero Nery Pumpido nunca se acomodó. Llegó sobre la hora y con jugadores que él ni pidió. Ahora tiene el Apertura como gran revancha. Después de la derrota, el entrenador no estuvo muy contento que digamos.
“Todo nos cuesta un huevo, un huevo todo. El que no quiera jugar que pida cambio, es muy simple. Hablen y ya está. Hay que dejar la vida en la cancha”, fue lo que se pudo escuchar que les dijo a sus jugadores en el entretiempo ante el Aborigen, cuando el marcador iba 3-0 en contra.
Una vez concluido el partido, y con el 4-2 no digerido aún, Pumpido se mostró un tanto más sereno. “Es imposible a veces remontar el partido cuando cometés tres errores.
Facilitamos todo eso. Ahora hay que analizar los inconvenientes que tuvimos”, analizó el argentino.
Victor Centurión, por su parte, ya prácticamente se despidió de la entidad de Para Uno. “Agradezco a la institución y a la hinchada de Olimpia por el apoyo, pero a veces uno necesita cambiar de aire”, tiró ayer a la 1080 AM. “Uno quiere buscar aires nuevos”, agregó.