Roque, Paulo, Justo y Richard. Con cuatro futbolistas paraguayos que militan en el exterior, la Albirroja arrancó ayer el operativo Copa América en Ypané. Sonrientes, serenos y optimistas, los jugadores de la selección paraguaya realizaron las primeras tareas físicas para llegar a punto a la importante cita internacional.
El cuarteto coincidió en que, de ahora en más, el principal desafío es reinstalar a Paraguay en la máxima vidriera. “Estoy cada vez más orgulloso de estar en la selección. En el poco tiempo de trabajo que tuvimos, ya se vio la mejoría en la gira que hicimos (en Costa Rica y Estados Unidos). Ojalá ya se puedan sumar muchos compañeros más”, sostuvo el defensor Paulo Da Silva, jugador del Toluca.
“Para ser un equipo competitivo debemos ser sólidos y volver a ser ese equipo que era agresivo en cualquier cancha. Eso se consigue con trabajo. Tenemos mucho tiempo y llegaremos sin ningún tipo de excusas para la Copa América”, acotó.
Roque Santa Cruz coincidió con el zaguero y señaló que la Albirroja debe volver a mostrar los dientes. “Paraguay debe volver a buscar ser intenso e incómodo para crearle preocupaciones al rival. Creo que debe volver a ser agresivo”, expresó el atacante del Cruz Azul.
Por su parte, Justo Villar dijo que se sentirá “como en casa” cuando arranque la Copa América de Chile, pues ataja en el Colo-Colo de dicho país. “Tenemos que llegar con todas las pilas puestas. Hay jugadores que tendrán sus primeras pruebas en la selección. Esta nueva convocatoria nos tiene muy ilusionados”, declaró