Mientras Argentina se pegaba un paseo en San Juan ante Bolivia (5- 0) y Uruguay humillaba a Guatemala (5-1) en Montevideo, la selección paraguaya de fútbol mostraba una flojísima presentación en el Manuel Ferreira, ante una aguerrida Honduras.
El amistoso ante los centroamericanos terminó en un empate de 2-2, con Roque Santa Cruz como amo y señor en la agradable noche asuncena. El delantero del Cruz Azul rompió el cero a los 8 minutos, pero con un tanto en contra.
Roque, en su afán de despejar un tiro libre de Martínez, terminó vulnerando el pórtico de Villar. Santa Cruz se repuso y, a los 20', aprovechó un córner ejecutado por el “Pájaro” para decretar de cabeza la paridad en Para Uno. Sin embargo, a los 22', Honduras volvió a adelantarse en el marcador por intermedio de Castillo, quien no perdonó la descoordinación defensiva albirroja, tras un gran pase de Martínez, el mejor de los “catrachos”.
Preocupación
El ingreso de González y Romero inyectaron vértigo a Paraguay. A los 55', Santa Cruz apareció para marcar su tercer tanto de la noche, el segundo para Paraguay. Minutos antes del empate, Haedo Valdez y Figueroa fueron expulsados tras agredirse, después de una criminal entrada del centroamericano.
La Albirroja hizo un partido pobre, sin argumentos sólidos. La mayor preocupación radica en la debilidad defensiva, teniendo en cuenta que el debut de Paraguay en la Copa América será ante la poderosa Argentina de Lio Messi y compañía. La fe y la ilusión nadie nos quita, pero la selección de Ramón Díaz estuvo muy lejos de enamorar a la hinchada y despedirse con optimismo de cara a un nuevo desafío.