Gracias a la “vaquita” de varios futbolistas, algunos miembros del elenco de General Díaz llenaron ayer sus heladeras después de mucho. Meses de atraso en sus salarios los obligó hasta a subastar camisetas de sus ídolos para poder llevar algo de alimento a sus hogares.
La terrible situación generó rabia e indignación en los peloteros quienes exigen a la Asociación Paraguaya de Fútbol que tome cartas en el asunto. Uno de los que salió a dar la cara por sus compañeros fue Roque Santa Cruz. “Es una falta de respeto a los colegas y lo más doloroso es que esto ya pasó el año pasado y estamos de vuelta en lo mismo”, dijo a la 730 AM.
El capitán del Expreso Decano criticó duramente la falta de interés en el asunto y no se explica cómo es que se viene arrastrando este tipo de problemas sin saber lo que está ocurriendo.
“Se puede prever, se puede regular, se puede presupuestar con lo que ellos reciben. Pero lo que es preocupante es dónde se fue el dinero, cómo se fue”, agregó Roque refiriéndose a la plata que las Águilas percibieron por derechos de televisación.
El artillero franjeado agregó que ya hay que dejar de hacer las cosas como en el pasado.
“No me interesa cómo se hicieron antes las cosas o si siempre se hicieron así. El fútbol evolucionó y eso nos lleva a tener que tomar medidas verdaderamente fuertes”, sentenció.
Dejar precedente
El delantero de Olimpia dijo que si la cuestión no mejora se deberán tomar medidas drásticas. “Aquí la propuesta seguramente va a ser parar indefinidamente el campeonato hasta que esto (deuda) se solucione. Seamos una generación de futbolistas que deje como antecedente una reglamentación que beneficie al jugador, que como todo trabajador tiene que percibir su salario”, tiró.
Santa Cruz anunció que incluso intercederá por sus colegas ante la APF. “Claro que me voy a comunicar con Robert Harrison para buscar en base al diálogo una solución, un mecanismo de control del dinero del fútbol que debe ser para los jugadores. Las estrellas de todo este show son los jugadores, no los dirigentes”, concluyó.