El capitán de la selección mexicana, Rafael Márquez, está en aprietos tras ser acusado de actuar como prestanombres para el presunto narcotraficante Raúl Flores. De probarse que es culpable, podría ir a parar tras las rejas por 10 años.
Según un comunicado del Departamento de Tesoro de Estados Unidos, varias empresas del “Príncipe de Cataluña”, entre ellas una escuela de fútbol, servían para el lavado de dinero, de forma ilegal.
Si bien la investigación está en proceso, las cuentas del defensor, su visa, y las propiedades que tiene en Norteamérica fueron congeladas por el Gobierno. Además, las empresas estadounidenses tienen prohibido realizar negocios con las compañías del zaguero.
Poco después de darse a conocer la situación de Márquez, la Procuraduría General de México informó que el futbolista se presentó de manera voluntaria a declarar.
Márquez es considerado uno de los mejores defensas centrales. Formó parte del plantel del Barcelona por varios años, actualmente juega en Atlas de Guadalajara. De comprobarse que está involucrado con el narco, el jugador sería desafialiado de la Federación Mexicana de Fútbol. ¿Qué pasó, Rafa?