El siempre polémico Marcos Lazaga protagonizó un nuevo capítulo oscuro en su vida fuera de las canchas. El futbolista fue demorado en la noche del viernes por agentes de la Patrulla Caminera, en Ñemby, para un control de alcotest al cual se negó. El paraguayo de 32 años se encontraba a bordo de su vehículo Mercedes Benz, color amarillo, sin chapa.
Fue interceptado por los agentes en la ruta Acceso Sur. Los intervinientes le solicitaron sus documentos y Lazaga accedió al pedido. Como segundo paso, intentaron hacerle el alcotest y el exjugador de Olimpia se opuso. Poco después, arrancó su automóvil y, sin sus documentos, avanzó pocos metros y se detuvo en una estación de servicios.
Descendió y fue al baño del local: permaneció oculto por más de una hora. Agentes de la Comisaría 11 de Arroyo Seco (Villa Elisa) se acercaron a la gasolinera para evitar que huyera.
La segunda vez
Finalmente, Lazaga salió y conversó con los policías. Argumentó que no quiso que se le practicara la prueba frente a los reporteros de los medios de comunicación. Se lo trasladó hasta la citada dependiencia policial. Allí le hicieron el alcotest, que finalmente dio positivo. Es la segunda vez que el delantero da positivo en un alcotest en nuestro país. La primera fue en el 2014, en un control en Puente Remanso (Mariano Roque Alonso).