A fines del mes pasado el fútbol local vivió un terremoto cuando el periodista mexicano Ignacio Suárez publicó un material basado supuestamente en una investigación que se hizo en Argentina.
Dicha publicación salpicó al titular de la Asociación Paraguaya de Fútbol (APF), Robert Harrison, a quien acusaron de liderar un cartel con venta ilegal de jugadores y de utilizar esquemas fraudulentos para transferencias de millonarios montos.
Tras la ceremonia de los Premios de Primera, el pope de la Asociación, habló con los medios donde rompió el silencio y se refirió al lío en el que lo involucraron. “El cargo de presidente de la Asociación es un cargo que tiene sus bemoles (valentía), uno debe saber convivir con eso hasta un límite, entonces esos límites hay veces que se sobrepasan y bueno uno toma otro rumbo y otras acciones”, señaló, refiriéndose directamente a la contratación de dos oficinas de abogados que se encargarán de defenderlo.
Aseguró que el lío que se armó en realidad es un drama ajeno y que el objetivo al involucrarlo es conseguir notoriedad.
“Si se pelean Juan y Pedro y le meten al presidente va a tener otra repercusión que si se pelean Juan y Pedro en la calle, entonces esa es la realidad”, expresó.
Serenidad
Harrison dijo también que todo el escándalo que se armó y todo lo que se publicó en los medios no le quita el sueño.
“Yo estoy tranquilo”, afirmó. Sobre su trabajo al frente de la institución indicó que no hay nada que esconder y que se basa por sobre todo en la claridad de las acciones.
“La transparencia siempre fue un eje de mi gobierno y forma parte de mi ser, entonces más que eso, ¿qué puedo decir?”, preguntó. Desde la APF habían anunciado que solicitarán la carpeta investigativa a la jueza federal de ashá Sandra Arroyo Salgado, quien supuestamente encabeza la causa