El Rey de Copas salió de su Bosque y se fue hasta Sajonia con la promesa de saborear un Kure asado y rescatar otra victoria en su deseo de lograr el tetra. Al menos eso pensó, pero tuicha ojavy el Leka, que se topó con un Chanchón salvaje que le mordió en cada rincón del campo.
Como si fuera los All Blacks con su famoso haka, Luqueño ya ganó de entrada con la actitud, ni le dejó respirar al puntero del campeonato y le hizo ver estrellitas con cada contragolpe. Los mitã’i Blas Armoa, Luis Ibarra y el cafetero, Kevin Serna, fueron más rápidos y peligrosos que motochorros.
Mientras el Expreso Decano no conseguía avanzar, arrancó menos que auto en película de terror, el Kure hizo de las suyas. A los 39’, el capitán Joel Benítez le robó el balón a Alejandro Silva y se la prestó a Jorge Núñez. Avatar, azul de la creatividad, metió un pase largo confirmando que solía ver los partidos de Andrea Pirlo.
Luego de viajar por el cielo asunceno, la caprichosa cayó en poder del colombiano Kevin Serna, quien quedó mano a mano con José Leguizamón. El zaguero decano pensó que el cafetero le iba a bajar un poco de vallenato, pero Serna le rompió la cadera con un reguetón y luego definió entre las piernas de Alfredo Aguilar. Obra de arte del futbolista de 21 años que de yapa le dejó para su cena al golero de la O.
Minutos después y justo antes de ir a vestuarios, el goleador auriazul dejó temblando el travesaño con un derechazo desde fuera del área.
No supo liquidar
La película no cambió para Olimpia en la segunda parte. A esa altura ya estaba más que obvio que le costaba digerir la carne de chancho. La paliza táctica de Chito Ayala a Daniel Garnero fue de manual.
A los 48’, Avatar Núñez protagonizó un para qué te traje luego de un bella acción auriazul. Erró el arco de manera increíble.
El Rey de Copas estuvo irreconocible. No quiso saber nada del juego bonito y le bombardeó el rancho a Luqueño durante todo el segundo tiempo. Hasta Antolín Alcaraz terminó tirando centros a la olla.
El suspenso se mantuvo hasta el minuto 95 pero por la misericordia del Chanchón, que se cansó de perdonar.
Con sus centrales defendiendo por cielo, mar y tierra, Luqueño coronó un triunfo que lo alejó aún más de la zona de descenso y lo acercó a la Sudamericana 2020. Mientras tanto, la diferencia del líder, Olimpia, sobre su escolta Libertad se redujo a 4 puntos.