El fin de semana no fue diferente a otros en los que la violencia volvió a estar presente. Peor aún, esta vez los protagonistas de los actos de agresión fueron jugadores de la categoría Juvenil.
En Villeta, el partido entre Libertad y 8 de Diciembre, disputado en el estadio Guillermo Aguayo, en el marco de la primera fecha del Cuadrangular final, transcurría normalmente con un resultado de 3-1 a favor del Albinegro, hasta que, cuando se despedía el cotejo, hubo un encontronazo entre el goleador liberteño Lucas Delgadillo, y el delantero del 8, Alcides Pineda. Según el portal Villeta en el Deporte, Delgadillo se disculpó por la fuerte entrada pero Pineda y sus compañeros empezaron a empujarlo.
Con el tiempo cumplido, el juez dio el silbatazo final, entonces los jugadores de Libertad se dirigieron hacia la banca, cuando los contrincantes los siguieron y se inició la batalla campal. Los hinchas de ambos clubes treparon la alambrada y se unieron a la repartija de puñetazos y patadas.
En la comisaría de la ciudad no recibieron denuncia alguna, por lo que no se cuenta con detenidos ni datos acerca de posibles heridos.
OTRO ESCENARIO
En la Liga Yaguaronina se vivió un episodio similar. También en la categoría Juvenil, en el duelo entre 30 de Abril y Porvenir se registró un incidente.
A los 15 minutos del segundo tiempo, el árbitro le cobró una falta al jugador del 30, Ramón Ferreira, quien protestó y vio la roja. Molesto por la decisión, Ferreira le dio un golpe de puño en la nuca al réfere Rodrigo Mendieta, quien se retiró bastante mareado y decidió suspender el cotejo, según el informe.
El partido fue interrumpido cuando se encontraba igualado a dos goles.