Rosa Benítez busca una orden de alejamiento.
Apoyo. Cerro Porteño puso a disposición del jugador el Departamento Jurídico. Rodrigo Burgos, de Olimpia, está con prisión domiciliaria por un caso similar. Foto: @SomosGEN En los últimos años van sumando los futbolistas que son involucrados en dramas judiciales por supuesta violencia. En la noche del domingo, aproxidamente a la hora en la que el Ciclón jugaba ante Libertad, la contadora Rosa Adriana Benítez, expareja del pelotero de Cerro Porteño, Julio Irrazábal, formuló una denuncia en su contra en la Comisaría 25° de Ytororo por violencia intrafamiliar, maltrato verbal y psicológico, hecho que habría ocurrido el mencionado día.
El futbolista de Cerro fue acusado en Comisaría de Ytororó. El caso habría ocurrido en la residencia ubicada en el barrio cerrado Ytororo Country Club. Cabe recordar que el volante cerrista ni concentró para el partido ante el Guma.
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Los dos niños que tienen en común habrían presenciado la discusión. Anteriormente, tuvieron una relación de cuatro años, pero según Rosa, hace tres meses que Irra se había vuelto muy violento.
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El caso ya se puso a conocimiento del Juzgado de Paz de Ypané, a la Fiscalía de turno y a la gente de violencia familiar de Ñemby. Benítez ya declaró ante el Ministerio Público.
De confirmarse la acusación, Irrazábal se expone a una pena de hasta seis años de cárcel, y la conciliación se aplica solo a delitos de penas máximas de dos años.
Orden de alejamiento
Según el subcomisario Gustavo Gómez, la supuesta víctima busca una ley que impida que Irrazábal se acerque a ella. “Julio le dijo que solo tenía que llegar a la casa o que iba a pasar otra cosa. La señora empezó los pasos para la restricción al hogar”, expresó el uniformado a la 970 AM.