Antonio Arias fue blanco de las quejas de la Academia, tras el partido ante Olimpia. El torneo Clausura cerró su cuarta fecha y, tal vez, fue la jornada más floja de los encargados de impartir justicia en los encuentros de fútbol. En el ojo de la tormenta se instaló Antonio Arias, quien dirigió el juego entre Olimpia y Nacional.
El entrenador de la Academia, Daniel Raschle, y algunos de sus jugadores denunciaron que “Castrilli” los insultó dentro de la cancha. “Los árbitros deben dar el primer salto. En primer lugar la honestidad y en segundo, el respeto. Son dos banderas. Estamos totalmente en contra de gestos y de maltratos de árbitros a jugadores”, aseguró ayer Horacio Elizondo, asesor e instructor de árbitros de la APF.
“Hay preocupación sobre el trato de los árbitros a los jugadores. Nosotros captamos rápidamente cómo les tratan a los jugadores, por sus gestos. Estamos preocupados y no nos gusta para nada porque no tenemos por qué prepotear y pasar por maleducados”, insistió el exréferi internacional.
Añadió que los árbitros deben ser una autoridad y no “un personaje autoritario”. En tanto, Amelio Andino, director de árbitros, señaló que el defensor tricolor Ricardo Martínez fue bien expulsado por “Castrilli”. Coincidió con Arias en que las dos tarjetas amarillas fueron bien exhibidas. “La segunda amarilla fue porque hizo una falta táctica”, explicó.