Gustavo Alfaro, DT de la Albirroja, compartió sus impresiones de cara a los partidos amistosos con miras al Mundial 2026.
“La idea mía es jugar con rivales que nos impongan desafíos, la única forma es nivelarnos para arriba. La única manera de ir a una Copa del Mundo a competir es teniendo una exigencia que nos demande”, resaltó.
El hecho de que el viaje sea incómodo, jugar de visitante contra Japón y Corea, y luego contra EE.UU. y México, sirve para prepararse, además de que las cuatro selecciones están encima de la Albirroja en el ranking FIFA, según explicó.
“Ahora empieza un trabajo diferente, distinto y complementario al anterior donde empezamos a buscar respuestas y formas de una manera diferente”, señaló.
Mencionó que dirigir una Selección enseña a trabajar el presente, es decir, plantear con los jugadores que hoy están a disposición y al 100% de su capacidad.
“Resulta que en el medio del camino se te caen los jugadores porque algunos se lesionan, o porque tienen suspensiones, o tenés jugadores que son necesarios y no están en su mejor momento”, comentó en Tigo Sports.
Tomó 16 años
Alfaro reveló que le tomó 16 años ser entrenador de una Selección Nacional desde que se propuso en el año 2006.
“Tuve la chance en el 2006, cuando fui a cubrir el Mundial del 2006 para una cadena de televisión de Colombia y voy a cubrir un partido amistoso Colombia - Alemania antes del Mundial de Alemania, un partido que ganó Alemania 3 a 1 y bajo por los lugares donde me llevaba la credencial. Desemboco en la conferencia de prensa y lo veo a Jürgen Klinsmann, técnico de Alemania, dando la conferencia de prensa, preparando la Copa del Mundo. Y yo dije, qué lindo sería tener esa responsabilidad de tener sobre los hombros los sueños de un país entero en una Copa del Mundo”, recordó.
En ese entonces, a él como profesional le acababan de echar de San Lorenzo de Almagro, por lo que su sueño era difícil de cumplir siendo que, como él dijo, todavía no se estaba afianzando ni siquiera como entrenador de Primera División.
“Desde ese día empecé a soñar con dirigir una Copa del Mundo y me acuerdo estar en la conferencia de prensa de Catar, en la previa al debut de la Copa del Mundo cuando íbamos encima al partido inaugural contra Catar, de ir caminando y en un momento viene Jürgen Klinsmann. Entonces le doy un abrazo y le dije: vos sos el responsable de que yo hoy esté acá. Y le conté eso y me miraba sorprendido. Y digo, diseñar ese sueño me llevó 16 años”, resaltó.