Víctor Hugo Mareco fue otro quien se lució, sacando todo por arriba y también por abajo. El rústico zaguero azulgrana tuvo un duelo muy especial con los delanteros cardenales. Su compadre Leo Cáceres tampoco desentonó. La expectativa era feroz, más aún después de ver el onceno que propuso César Farías, DT del Ciclón, para el estreno copero. El venezolano apostó por una doble línea de 4, dejando a Leal y Beltrán la complicada misión de pelear con los enormes zagueros colombianos.
En el primer minuto de juego, Willian Tesillo peinó un centro de Seijas y el balón se estrelló en el palo. Milagro en la portería de Antony, que solo se limitó a mirar. Era la carta de presentación de los anfitriones.
Cerro Porteño se defendió como gato panza arriba en los primeros compases del cotejo, pero también se dejó encerrar por varios lapsos. Y es que Santa Fe fue un verdadero aluvión, llegando por todos los flancos.
Para fortuna del Ciclón, el portero Antony Silva tuvo una noche inspirada, desactivando hasta sin querer queriendo las numerosas chances que tuvo el conjunto “Cardenal”.
Las aproximaciones del Ciclón, en la primera etapa, se resumieron en un potente tiro libre de Leal que no pasó lejos y una chilena mordida de Mareco que estuvo muy cerca de encontrar portería.
Lo cierto y lo concreto es que, Cerro Porteño jamás intentó tener la posesión del balón. Parece que la “caprichosa” ardía en fuego, porque nadie la quería tener, solo estaba permitido el balonazo a cualquier parte. Entre paréntesis se puede poner a Luís Leal, el único que intentó tener la pelota, pero sin éxito.
San “Antony” Silva
El Ciclón se puso el chip copero, el de encerrarse y salir de contraataque. Sufrió mucho, demasiado podríamos decir, pero tuvo la valentía y la fortuna para sacar un empate que sirve muchísimo para encarar los demás partidos del Grupo 8 de la Copa Libertadores.
El gran héroe de la noche fue Antony Silva, quien se cansó de sacar pelotas, incluso coronó su actuación magistral con una tapada fenomenal en el minuto 94. En resumen; el juego no fue para nada alentador, pero el marcador ayuda a ganar en confianza.
El héroe
El portero azulgrana, Antony Silva, se puso la capa de superhéroe y fue el artífice del empate del Ciclón en El Campín de Bogotá, ante Independiente de Santa Fe. El arquero tapó todas; sacó por arriba, por abajo. Sencillamente, estuvo infranqueable para los cardenales. No existe la perfección, pero si la labor de Antony no es un 10, pega en el palo.