El portero santaniano, Gustavo Arévalos, tuvo una destacada actuación en el torneo Apertura con el equipo del Tapiracuai, en su primera incursión en la máxima categoría del balompié guaraní. Arévalos es oriundo de la ciudad de San Lorenzo y empezó a practicar a la pelota ya de grande, pero supo abrirse camino hasta convertirse en jugador de Primera.
“Yo empecé tarde a dedicarme al fútbol, antes me dedicaba más al trabajo y jugaba en la canchita del barrio. Trabajaba en el mercado de San Lorenzo, en la parte de frutería y verdulería. El local se llama San Isidro, trabajaba con mi cuñado, dos años estuve ahí. Eso fue antes de empezar a practicar fútbol”, explicó el guardameta a EXTRA.
El golero pasó toda la etapa previa con su equipo y luego estuvo un tiempo en Carapeguá. “Un amigo me había llevado a jugar en la liga santaniana y de ahí empecé, eso fue a los 17 años. Primero jugué el Interligas, luego pasamos a Intermedia y gracias a Dios ascendimos a Primera. Estuve también dos años en Carapeguá. Ahora tengo mi casa en Santaní, pero siempre le visitó a mi mamá en San Lorenzo”, finalizó Gustavo, que quiere volver a ganarse la titularidad.