Esteban Rodríguez, con Síndrome de Down, tiene un lugar ganado en las canchas de Pirayú.
Cuando se juega al fútbol en la ciudad o se disputan finales, sale frente a su casa y le llevan a los partidos, sea del club que sea, mencionó Adalberto Rodríguez, delegado del Club Sol de Mayo.
Pero días atrás, en la cancha de Pirayú Sport, el cuarto árbitro pidió que le retiraran de la cancha durante un partido y lo que siguió fue desgarrador.
Un directivo entró al campo porque nadie se animaba a sacarle porque lloraba mucho.
“Esteban es un símbolo no solo de nuestro club sino de todo Pirayú. Todos le conocen como una persona excepcional”, destacó el dirigente.
Recordó que ya fueron a pitar árbitros de la APF, de la UFI y no sabe por qué el réfere se tomó esta vez con él.
“Está indignada la gente de Pirayú por esta cuestión y a parte que es una discriminación porque él no le molesta a nadie”, dijo.
Esteban entra a la cancha por entrar. Disfruta del deporte en carne propia y, como no estaba en la lista de convocados, pidió que le retiren.
“Él tiene 37 años pero es un niño. Le dijeron que iba a llorar y el cuarto árbitro respondió que no quería saber y que llore entonces”, expresó.
Adelantó que verán ante la Liga si corresponde pedir un carnet para evitar mismas situaciones.