Conocido por un fuerte carácter, el vicepresidente del Deportivo Capiatá, Óscar Barreto, no ocultó su lado sensible al realizar un bondadoso acto hacia una chipera que le tocó el corazón.
La mujer, con alrededor de 7 meses de embarazo, subía y bajaba las gradas del sector Preferencias del estadio Erico Galeano. Barreto vio que la trabajadora no tenía éxito con la venta, entonces le preguntó el precio de cada chipa y comenzó a contar cuántas había en el canasto.
Extrañada, la vendedora le cuestionó al directivo por qué hacía eso. “Voy a comprar todas”, le respondió Barreto, y ante la incrédula mirada de la señora, le pagó más de G. 200.000 y comenzó a repartir el alimento entre los hinchas y periodistas que se encontraban en el lugar a la hora hora del encuentro ante Santaní.
“Antes le dije en broma que tenía que prometerme que Capiatá iba a ganar, porque lo que dice una embarazad o cuando maldice, se cumple”, recordó Barreto.
“Desconozco la situación de la señora, pero me llamó mucho la atención y me tocó el corazón que con su estado de gravidez tenga que estar trabajando bajo el intenso calor. Quizás no tiene la oportunidad de compartir con su familia porque primero debe pensar en llevar el sustento a sus hijos”, lamentó el directivo.
Con lágrimas en los ojos, la chipera agradeció a Barreto y se retiró.
SE CUMPLIÓ
Y el presagio de la embarazada no falló, el Escobero derrotó al equipo visitante por 2 a 1, en la cuarta fecha del Apertura. “Lo bueno es que nosotros tuvimos el coraje, la valentía de los jugadores para reponernos del empate”, expresó el DT Gustavo Florentín.