
Lo que todo el público aurinegro presagiaba, ocurrió en Dos Bocas. La idea de la directiva de Guaraní no funcionó y, en dos partidos, Fabricio Bassa vio caer a su equipo, primero ante Nacional (2-1) y luego ante Capiatá (3-0). A pesar del pésimo arranque, el entrenador uruguayo continuará en el cargo.
El DT se hizo responsable del mal momento del Indio. “No hay justificativos, Guaraní jugó muy mal y perdió muy bien (ante Capiatá). Uno debe de tener la dignidad de decir que le va mal y acá no hay otro más culpable que el entrenador”, dijo el estratega a la 1080 AM.
Bassa vino a Paraguay para trabajar y, según él, no para llevarse dinero. “No soy un ladrón, vengo a trabajar como todos. No estoy acá por dinero, no estoy atado al cargo. Me enseñaron a ser humilde y no quiero llevar cosas que no me corresponden. Me siento respaldado por los jugadores, con la fuerza para continuar”, indicó en la 730 AM.
Primera opción
Crispín Maciel interinaría el cargo si es que Bassa no sigue. “Lastimosamente, la suerte no le acompañó a Fabricio (Bassa). Los muchachos me dicen que les resulta raro lo sucedido porque entrenan casi igual que con (Fernando) Jubero. La dirigencia aún no me dijo nada. Si me quieren dar el plantel principal no hay problemas, soy empleado del club”, dijo a la 780 AM.