Zulmira González Velázquez (72) asegura que su sobrino Gustavo Rolando Chávez (41) se adueñó de su vivienda. Según la denunciante, el martes por la tarde intentó ingresar a su domicilio, ubicado en Lambaré, pero los portones estaban candadeados, por lo que permaneció a la intemperie junto a sus pertenencias hasta después de la medianoche.
Toda una vida
“Esta casa es mía, es producto de mi esfuerzo. Casi 40 años viví acá y le crié a este sobrino como si fuera mi hijo, pero hace 3 años me echó y tuve que ir a vivir a Pirayú. Mis familiares de allá me dijeron que no iban a poder cuidarme, ya que sufro de una enfermedad de la sangre, por lo que tuve que volver”, relató la afectada.
Agregó que en 2013, año en que afirma fue echada por su familiar, denunció el hecho a las autoridades, pero no la tomaron en serio por algunas secuelas de un derrame cerebral que había sufrido. “De repente me cuesta un poco hablar. La gente no entiende eso y cree que estoy loca”, lamentó. Luego de que vecinos dieran aviso el martes al 911, una patrulla policial de la Comisaría 14, Central, la trasladó al albergue de la Primera División de Infantería de las FF. AA., donde pasó la noche.
Un equipo de EXTRA intentó dialogar con el sobrino de la denunciante para obtener su versión, pero no se encontraba en el domicilio al momento de nuestra visita. El caso se encuentra ahora a cargo del Ministerio Público, específicamente en manos del agente fiscal de la Unidad N° 5 de Lambaré, José Planás.