El cuerpo sin vida encontrado esta siesta con signos de abuso sexual en un baldío de la ciudad de Caaguazú, resultó ser de una niña de 12 años, cuya desaparición había sido denunciada poco antes de la Navidad del año pasado, según se confirmó esta noche.
Se trata de Anabel B. G., nacida el 17 de abril del 2010, cuyo cadáver presentaba heridas punzantes y cortantes, así como lesiones en el cráneo; estaba semidesnudo.
Al principio, se sospechó que sería una mujer mayor de edad, a quien la Policía no pudo identificar, porque sus huellas no fueron encontradas en los registros del sistema de la Policía Nacional, pero horas después se logró saber su nombre y se confirmó que era una menor de edad.
El cuerpo había sido llevado a la morgue del Hospital Santa Clara, de Caaguazú, donde fue inspeccionado por el médico forense, Fernando Ortiz, quien diagnosticó como posible causa de muerte traumatismo de craneoencefálico severo, así como lesiones en la cara con un elemento cortopunzante.
Se presume que en el momento del hallazgo, la víctima llevaba entre 10 y 12 horas de rigidez cadavérica.
Intervinieron en el caso el fiscal Alfredo Mieres, así como efectivos de Criminalística y de Investigación de Hechos Punibles de la Policía Nacional.
Según datos, la niña era huérfana de padre y madre, y había quedado al cuidado de su abuela.