La historia de Deisy podría ser la de muchas personas que están leyendo. Bien dicen que cuando la economía toca el bolsillo de las familias, los problemas de pareja ahí empiezan. Conocé por lo que atraviesa esta mujer y lo que le responde el licenciado Ángel Romero:
“Mi marido y yo estamos juntos ya hace tiempo. Nunca tuvimos problemas de ningún tipo, hasta que conoció a unos amigos adictos al juego, ahí él se volvió uno más.
Ahora, tiene un problema con las apuestas. Le encanta apostar, y ya no sabe cómo salir de eso, es como un círculo vicioso y nos está poniendo en grandes problemas a la familia.
Es una persona que gana buena plata, trabaja bien, no se puede quejar, pero, así como tiene se va en su vicio.
Está destruyendo nuestro hogar porque cada vez aparece menos en la casa.
Borracho
Él tiene 43 años y yo cerca de los 40. Apenas termina sus actividades del día ya está en casas de apuestas. Llega borracho y tarde, muchas veces con golpes en la cara, cuando no se entiende con su contrincante.
Ya no sé qué hacer con él. Es el famoso ka’u argel también ya ahora para más yapa.
No entiende de razones, y conste que él no era así, era el tipo más entendido del mundo. Traté de hablar de todas las maneras con él para que tome terapia, pero no hay caso.
Él era otro hombre cuando lo conocí hace 9 años, era súper hogareño, se desvivía por mí y nuestros hijos (tenemos dos, de 6 y 8 años).
Con decirte que hasta los ahorros de mis hijos se atrevió a tocar para poder calmar su adicción al juego.
Cambiante
Un día de repente llega y está bien, se puede hablar con él, pero la mayoría de las veces no es así.
Me dice en esos pocos días que llega lúcido, que va a cambiar y que le perdone, que por sus hijos haría todo, pero es historia, se transforma después.
Con este problema llevamos un año, ya no sé qué hacer. Él no es mala persona y le amo demasiado, pero es insano ya todo esto.
No sé cómo le ayudo y no sé si dejarle o no.
Buen día, querida lectora. Los juegos de azar y apuestas casi nunca llevan a buen puerto, por lo que se gasta en ellos y porque lo que se gana (que al final es un recupero nada más de lo que se gastó). Si decís que esto comenzó hace un año nada más, deberías indagar ¿qué pudo haber pasado hace un año, qué le llevo a las apuestas? ¿Qué no encuentra de entretenido en la vida que llevaba antes? De igual manera, tener una conversación sincera con el mismo, donde le expongas cómo te sentís con lo que está pasando, indicarle que le vas ayudar en todo lo que él necesita para salvar la relación de pareja, la familia, pero en especial para recuperarse como persona. Todo aquello si él quiere ayudarse antes y pone de sí. Volvé a plantear la ayuda de un profesional para que aquello tenga un resultado integral para todos. En las adicciones, lo importante es el apoyo, la contención, el amor de la familia, pero por sobre todo la firmeza en el proceso.
