Manchitas, tenía 2 años, y era la mascota de una familia del barrio 1° de marzo de Cambyretá, Itapúa. No se sabe a qué hora la mataron, pero se presume que fue en la madrugada del martes 27 de mayo.
Clara Chavely Benítez, y su marido la buscaron, escucharon disparos a la madrugada, muy cerca de su casa, pero no salieron a verificar en el momento. Cuando se levantaron para prepararse a ir a trabajar no encontraron a su perra, Manchitas.
Pensaron que pudo haber huido asustada por el ruido de los disparos. Camino al trabajo encontraron a su amiga de cuatro patas tendido en la calle, a solo unos metros de su casa. Ya estaba muerta y tenía una extraña herida con orificio en la frente.
Al principio pensaron que era un balazo, pero al parecer fue producto de un golpe. “Le trajimos a casa, le bañé y ahí parecía que era como si le hubieran golpeado con un mazo o un machetillo”, dijo Benítez, a EXTRA.
La denuncia fue realizada en la comisaría, intervino la Fiscalía y el animal fue sometido a una necropsia. El resultado arrojó que fue asesinada con un arma contundente.
La fiscal Angelina Arriola Funes señaló que se investiga la muerte de “Manchitas” y el ataque a otro perro del mismo barrio que resultó gravemente herido.
“Encontramos el cuerpo sin vida de un perro que tenía una herida en la frente. El cuerpo fue trasladado a una veterinaria para su inspección y no se pudo confirmar que haya recibido un balazo; no se encontraron restos de plomo, pero sí una herida en la cabeza que le causó la muerte”, indicó.
Por otra parte, manifestó que un vecino de la primera denunciante también denunció que encontraron a su perro herido.
“A dos casas también se encontró otro perro herido, presumiblemente con machete”, expresó.
La fiscal apuntó que la investigación está en curso y recordó que con los cambios de la ley de protección animal la pena máxima es de 6 años de cárcel.