04 mar. 2025

Una doble odisea: nacen mellizos a bordo de una lancha

Embed
Mellizos

Embed
5A-2
Hicieron una travesía de 140 km, de Puerto Pinasco a Concepción.

El parto se adelantó, sobre las aguas.

Daniel y Digno tenían mucho apuro para venir al mundo, pues se adelantaron casi un mes a la fecha prevista para el parto.

Su madre, a las corridas, tuvo que ir a subir a la primera lancha desde Puerto Pinasco, Chaco, para viajar hasta Concepción, en un recorrido por agua de 140 kilómetros para llegar al hospital regional.

En ese trayecto, el miércoles, María Ester Bareiro (41), con 36 semanas de gestación, era acompañada por su médico, Daniel Gómez, responsable de la Unidad de Salud de la Familia (USF) de la localidad chaqueña.

En la embarcación también iba su hermana Silvia Bareiro y, a menos de 30 kilómetros de llegar a tierra, el alumbramiento de los bebés ya era inminente.

“Debido a las molestias que presentaba en ese momento, trasladamos rápidamente a la señora hasta el hospital, pero el parto se adelantó. Estando en la lancha, ella comenzó a dilatar rápidamente y rompió bolsa, situación que dio como resultado el nacimiento de dos varoncitos, de 2,900 y 2,700 kilogramos de peso, respectivamente”, relató el doctor Gómez.

La espera desesperaba

La hermana de la paciente detalló la odisea que tuvieron que pasar durante tres horas, antes de llegar al centro médico de cabecera.

“Se complicó un poco porque el mayor, Daniel, estaba sentado. Justamente por eso tenía parto programado”, explicó la familiar. Agregó que el momento de mayor tensión fue cuando uno de los “mellis” se asomó primero con los pies.

“Nos asustamos. En todo momento yo rezaba para que todo saliera bien. Son una bendición por partida doble”, expresó entre risas de emoción la tía. Contó que María Ester tiene dos hijos más y que, con lo “mellis”, ya “cerrarían la fábrica”.