La activista trans Yren Rotela denunció en sus redes sociales que un chofer de Uber les discriminó a ella y a dos compañeras más que tenían que ir al hospital, porque al verles simplemente decidió no alzarles, aceleró con todo y se fue.
Una adolescente trans tenía ayer mucha fiebre y otros síntomas sospechosos de dengue hemorrágico. Así que Salvador Arias pidió un uber para llevarlo a consultar. El conductor canceló el viaje pero enseguida apareció otro, que sí les llevó a destino.
“Ni siquiera parecíamos peligrosas, era una situación de emergencia”, contó. Es la primera vez que le pasa algo así, pero sabe que otras personas trans ya vivieron la misma situación.
Yren hizo su queja a través de la aplicación y le respondieron que van a hacer sus averiguaciones: “Nos sentimos orgullosos de nuestra cultura inclusiva, Yren, por lo tanto vamos a trabajar en el caso y nos comunicaremos contigo cuando tengamos noticias”. Por ahora, ellas nada saben del conductor, solo conocen el modelo del auto.
“Puede ser tu vehículo, pero es la vida de una persona la que está en riesgo y es tu prejuicio el que puede hacer que muera antes de llegar al hospital o el daño se haga irreversible”, añadió Rotela.