
Unas 1.000 personas se manifestaron ayer en Tacuatí, San Pedro. Repudiaron el asesinato del intendente Ramón Carrillo, ocurrido el 24 de abril. Pidieron que terminen los crímenes en la zona y que vuelva la paz. Miguela Colmán, esposa de Carrillo, participó de la actividad.