19 abr. 2024

Su concubino le reventó y el suegro la amenaza por denunciar

La mujer aseguró que teme por su vida y pidió que la Fiscalía ordene también la captura del padre de su pareja.

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El concubino quedó detenido en sede de la comisaría novena de Limpio.

“Si mi hijo se va a la cárcel, no vas a vivir mucho tiempo en su casa”, fue la clara amenaza de Adrián G. L., contra su nuera. La joven de 28 años es madre de cinco hijos entre los cuales dos son nietos de Adrián. El padre de su concubino le amenazó luego que ella denunciara a su novio Gustavo G. G., de 32 años, por violencia doméstica.

Daysi relató a EXTRA que hace seis años vive con Gustavo, con quien tiene dos hijos: una niña de tres años y un nene de once meses, pero eso ni siquiera le importó a Adrián, quien además de sacar varias pertenencias de la casa alegando que pertenece a su hijo, le dejó sin llave. “Ahora (por la mañana de este viernes) salí para venir al juzgado y tuve que dejarles a cuatro de mis hijos solos y sin llave. Yo no sé si él va a entrar o va a entrar otra gente”, afirmó la mujer responsabilizando al suegro de lo que le pudiera pasar a los niños.

El hecho de violencia ocurrió el miércoles alrededor de las 23:20. Según el relato de la víctima, Gustavo estaba tomando alcohol y tras una discusión le partió una botella por la cabeza. Ella llamó a los agentes de la comisaría novena, quienes detuvieron al agresor. Entrada la mañana, su suegro acudió a la vivienda y, entre golpes de puño y patadas e insultos se llevó el vehículo, sofás, sillas, aire acondicionado y hasta el ventilador, además de la llave de la casa.

La mujer lamentó que la primera denuncia fue escuchada y la policía actuó rápidamente, pero la segunda ya ni ahí le hizo caso el fiscal de turno Rubén Moreno. “Solo ordenó la detención de mi pareja y no de mi suegro. Ayer vino a atacarme nuevamente. Yo tengo miedo porque vivo sola con mis 5 criaturas”, expresó la joven madre.

Mencionó que está aún más preocupada porque los policías le dijeron que la Fiscalía podría ordenar la prisión domiciliaria de su concubino. “Dónde va a cumplir, si este señor (el suegro) vive en frente”, se quejó.