Doña María Belén González, una abuelita de 98 años de Ciudad del Este, vive desde hace unas semanas con una gran angustia y tristeza que casi no la deja dormir por las noches desde hace unas semanas. Esto debido a que su propio sobrino junto a su esposa tratan de sacarle su humilde casita a ella y a su hijo, Gerónimo, también ya un hombre de tercera edad.
Hoy, tras un nuevo intento de desalojarlos con ayuda de la Policía, los abuelos fueron defendidos por sus vecinos, apoyados por unos jóvenes abogados.
Gerónimo contó a Info Alto Paraná Digital que el calvario inició cuando su mamá tuvo COVID y la llevaron a internación, todo este tiempo él la acompañó en el hospital. Afortunadamente logró salvarse de la enfermedad, pero que cuando llegaron a casa se toparon con la sorpresa de que candadearon su portón para que no pasaran más.
“Nos quedamos acá en frente como 6 horas, luego pedimos ayuda, nos dijeron que ya no íbamos a entrar más y que iba a venir un camión para llevarnos junto a nuestras cosas, que de eso no nos preocupemos, yo les reclamé y me golpeó (por su primo, sobrino de la abuela)”, dijo el hijo de la doña.
Mencionó que el sobrino asegura que esa casa les pertenece y que la abuela y sus hijos solo se apoderaron del lugar. Incluso, supuestamente creaban denuncias falsas de violación del deber del cuidado hacia la abuela, para que los hijos ya no se acerquen a ella y así les sea más fácil sacarla de su vivienda.
Los abogados presentaron hoy un pedido a la Justicia para que no dejen sin casa a los abuelos.