Paraguay se cocinó este domingo un lugar en la historia, en el Libro Guinness de los Récords, con una hazaña. Bajo el sabroso lema “Un récord hecho a huevo”, el país sirvió más de 2.800 porciones de huevos revueltos en una hora, batiendo el récord mundial y dejando el aroma del triunfo (y del desayuno) flotando en el aire.
El desafío se desarrolló en el Parque Ñu Guasú de Luque, donde desde bien temprano las sartenes no tuvieron respiro. Entre las 7:30 y las 8:30 de este domingo, cocineros y voluntarios se movieron al ritmo de espátulas y cronómetros, logrando servir un total de 2.806 porciones de al menos 200 gramos cada una. Todo esto, en el marco de una corrida solidaria organizada por ASU Runners y la Fundación Unidos Contra el Cáncer (Funca), que reunió a deportistas, familias y amantes del huevo en una auténtica fiesta comunitaria.
El jurado oficial de Guinness World Records, llegó desde Colombia, dio el visto bueno y certificó la marca. Gustavo Koo, director de Nutrihuevos, cerebro detrás del reto, emocionado: “Cada minuto contaba, cada distribución contaba. Gracias a todos, lo logramos”, expresó.
La Senatur declaró la actividad de interés turístico nacional. Su ministra, Angie Duarte, aplaudió el logro y destacó que Paraguay “se posiciona en la vidriera global como un destino que celebra la vida, la unión y la esperanza”.
Más allá del récord, el evento también quiso recordar que el huevo no solo se come en el desayuno: es un aliado poderoso para una alimentación saludable, rico en proteínas, vitaminas y minerales.
Con música, deporte, solidaridad y una montaña de huevos revueltos, Paraguay demostró que cuando el país se une, no hay meta imposible, ni sartén demasiado grande.
Para lograr la hazaña hicieron falta 17.000 unidades de huevos y 200 voluntarios en la cocina y la organización.