La promulgación de la ley que prohíbe el castigo físico contra niños y adolescentes generó polémica, pues varios papás y mamás se rehúsan a dejar de “corregir” a sus retoños. El documento, firmado por el presidente Horacio Cartes, tiene como objetivo “la protección de niñas, niños y adolescentes contra el castigo físico y otros tratos crueles, inhumanos o degradantes”.
María Silvia Calvo, representante de Global Infancia y una de las principales propulsoras de la normativa, indicó que la ley plantea la importancia de criar y educar sin hacer violencia. “El espíritu de esta ley es promover formas diferentes y políticas públicas para criar”, argumentó.
Todo acto que implique el uso de la fuerza o amedrentamiento, como por ejemplo pegar con reglas, perchas, cintos, dar tirones de oreja o hacer arrodillar a la criatura sobre maíz, está prohibido por esta nueva ley.
“La idea de que el castigo físico es la única forma de imponer disciplina sigue muy arraigada en Paraguay. Incluso dicen que vamos a ser los responsables de la formación de futuros delincuentes”, lamentó la representante de la organización.
Sanciones
La aplicación de medidas estará a cargo de la Defensoría de la Niñez y la Adolescencia y la Fiscalía, basadas en el Código de la Niñez o del Código Penal.